Destinado a un joven soltero al que le encanta recibir a amigos y familiares, este piso de 86 m2 responde a las necesidades de su propietario, combinando comodidad y funcionalidad, además de imprimir su personalidad en el diseño del proyecto. El proyecto está firmado por el estudio de arquitectura C2HA, dirigido por los socios Ivan Cassola, Fernanda Castilho y Rafael Haiashida.

El cliente quería que su nueva casa fuera moderna y adaptada a su rutina y pidió una buena cantidad de armarios en la suite principal y un despacho en casa que pudiera utilizarse como dormitorio los días de visita. Para aportar mayor fluidez y aprovechamiento del espacio, los arquitectos invirtieron en la integración de las tres zonas sociales -cocina, salón y balcón-, flexibilizando su uso.

En el mismo espacio se encuentran el comedor con una barbacoa y un sofá, una zona para reunir a los amigos, una zona de bar y, por último, la cocina. El suelo de vinilo abarca todos los ambientes para resaltar aún más la integración. El cemento quemado de las paredes resalta la fiesta estética del resto del piso e imprime la personalidad, las aficiones y la rutina del cliente.

En los dormitorios, el despacho mantuvo la configuración original con algunos toques que confieren elegancia y modernidad, como armarios grises y un cabecero de madera. La iluminación indirecta que impregna todo el piso también pone de relieve la posibilidad de crear distintos escenarios según la ocasión.

En todo el proyecto se utilizaron tonos sobrios como el gris, el negro y la madera. Otros materiales, como el metalón negro en los estantes sobre la encimera de la cocina, la parrilla de la barbacoa y en algunos muebles del salón, refuerzan el objetivo de dar un aspecto moderno y masculino.