El diseño de esta casa surgió del deseo de sus habitantes de tener una residencia moderna, integrada e iluminada. "He trabajado 30 años para poder tener la cocina de mis sueños", esta fue la petición del cliente a la oficina Arquitectura Tulli que firma la renovación de 87 m².

Tras años viviendo en una casa del familiar barrio de Tingui, en Curitiba, la familia deseaba disponer de un espacio perfecto para recibir visitas. Cocina El comedor y la zona gourmet se integraron en una distribución digna del vestíbulo de un hotel.

Para dar identidad al entorno integrado, la oficina fue audaz en la elección de materiales: cemento quemado y la madera son los protagonistas en los revestimientos y el mobiliario, componiendo un ambiente industrial.

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El área social ganó un pérgola La puerta de entrada se camufla en el panel de madera, aportando linealidad y unidad a la pared del salón. La isla de granito blanco también rodea el pilar y cuenta con una torre de enchufes oculta y una barra húmeda para optimizar la logística de la cocina. Al otro lado de la isla, se creó un espacio para comidas rápidas con cuatro encantadores taburetes de madera.

Para el comedor, que se encuentra a la izquierda de la isla, se diseñó y construyó una mesa con tablero biselado de cristal blanco lechoso, en la que se disponen armoniosamente ocho asientos. En un lugar destacado se construyó la vitrina de porcelana con una bodega en la parte inferior. Su encanto especial reside en la iluminación lateral con LED verticales dispuestos en efecto cascada.

La ampliación del espacio dio paso a un nuevo horno de leña junto a la parrilla, que -a su vez- recibió un cambio de baldosas que dialogaba con el borde de la parrilla de granito. El suelo fue sustituido por baldosas de gres porcelánico en un tono grisáceo que recuerda al cemento quemado, complementando la materialidad de la casa, que responde a la coherencia del estilo industrial.

La iluminación ayudó a componer el ambiente industrial con los raíles electrificados negros y se combinó con otros elementos, incluida la pérgola. El resultado fue un proyecto que respetó el presupuesto y cumplió las expectativas del cliente, aportando modernidad, sofisticación e integración al área social de la familia.