Todos sabemos que vivimos en el extraño mundo de Black Mirror, pero no todos los robots dan miedo, ¡algunos son bastante monos! Esta bolita de pelo se llama Nicobo y fue creado por Panasonic para ser un pareja de hecho. Como una mezcla de gato y perro, mueve la cola, se acerca a la gente e incluso suelta pequeños puñetazos de vez en cuando. La diferencia es que puede hablar a su dueño con voz infantil.

El objetivo del pequeño robot es crear una nueva forma de interactuar con la tecnología, generando felicidad El Nicobo busca la amabilidad y la compasión de la gente que le rodea, revelando sus debilidades e imperfecciones. La idea es que estos gestos hagan sonreír de algún modo a sus dueños. Por ejemplo, cuando le acaricias, mueve la cola y, gracias a su base giratoria, su mirada se volverá hacia ti cuando le estés hablando.

Panasonic afirma que el Nicobo tiene su propio ritmo y emociones Está equipado con micrófonos, cámaras y sensores táctiles que le permiten reconocer cuando hay alguien cerca, hablándole, acariciándole o abrazándole. A medida que los usuarios interactúan con él, el robot expresa gratitud y amabilidad, haciendo felices a todos, incluso a sí mismo.

La mascota robótica se financió a través de una campaña de crowdfunding, en la que se lanzaron 320 unidades, cada una por unos 360 dólares -todas ellas se han agotado ya en la fase de preventa-. Tras esa inversión, la empresa espera que los dueños gasten unos 10 dólares al mes para conectarla a un smartphone y recibir actualizaciones de software.