La artista japonesa Monami Ohno, apodada la "chica de cartón", crea intrincadas esculturas a partir de cajas desechadas.

Inspiradas en la cultura pop, los dibujos animados y las películas, las obras de arte van desde criaturas, monstruos y robots; armas automáticas; relojes gigantes; zapatos realistas; diminutos vehículos de lujo; y comidas y aperitivos de comida rápida.

La artista comienza con un boceto de sus ideas en cartón -para tener una primera noción de las dimensiones- y luego recorta el material y le da forma con pegamento, a veces utilizando agua si es necesario.

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Monami hizo un curso de animación en 3D en la Universidad de las Artes de Osaka (Japón). Como no podía permitirse los gastos extra de los proyectos de clase, pensó en el concepto del cartón -utilizando cajas que había recogido- como herramienta para completar con éxito el curso.

Tras años de práctica, con unas 200 esculturas en su portafolio, el arte de Ohno ha ganado popularidad, con algunas de sus piezas expuestas en galerías de Japón y el extranjero.

Su impresionante serie de detalladas obras de arte se construye con tijeras, un cutter normal, una regla, pegamento, cinta adhesiva y, por supuesto, mucha pasión.

La "chica de cartón" deja intactos el color natural y la textura de la superficie, para resaltar el encanto de este material cotidiano.

Una escultura de unos 10 cm de largo, ancho y alto tarda unos 10 días en hacerse, mientras que una seis veces mayor puede llevar tres meses.

Cada pieza se compone de varias partes intrincadamente agrupadas, lo que da al artista la oportunidad de generar múltiples formas y patrones.

"Intenté hacer algo con las cajas. Descubrí que el cartón es un medio sorprendentemente divertido con el que trabajar y a partir de ahí empecé a crear de verdad con él", explica.

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*Via Designboom